Intentan embargar vivienda por crédito que nunca solicitó

OMAR VÁZQUEZ VALENCIA

Cosoleacaque. Un hombre en situación de cáncer terminal, exige justicia ante lo que señala es un atropello de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) que reclama el pago que supera 140 mil pesos por un crédito solicitado por un elemento en activo, identificado como Roberto Carlos González Martínez, nombre con el cual cuenta el paciente que negó rotundamente haya sido alguna vez militar.

Citó Roberto Carlos que hace una semana, personal de la SEDENA, llegó a su vivienda conocida en el fraccionamiento “Los Arcos”, indicándole que contaba con 10 días hábiles para presentarse en la ciudad de México ante el Juez Civil de Cuantía Menor del Tribunal Superior de Justicia de la C.D.M.X. para aclarar la situación, pues de lo contrario ellos contaban ya con una orden de embargo inmediato.

Aunque González Martínez trató de explicar que jamás fue parte de las fuerzas armadas, y que justo el 22 de mayo de 2017 cuando fue solicitado el préstamo por 103 mil pesos ante el Banco Nacional del Ejercito Fuerza Aérea y Armada, suma que a la fecha aumentó con los intereses, él se encontraba internado, lo cual pudo demostrar con su expediente.

“Ya no sé si me voy a morir por la enfermedad o por la preocupación, yo jamás he trabajado para la SEDENA, a mí me están dando una semana para ir a la ciudad de México y demostrar que no soy la persona que andan buscando”.

Conforme a los documentos entregados a la probable víctima, se aprecia la matrícula D1 904 655, la que corresponde a un soldado de nombre Roberto Carlos González Martínez, el cual especifica tiene su vivienda en calle Revolución 309 de la colonia Cardenista, en el municipio de Jáltipan de Morelos, dirección que aparentemente es apócrifa.

“La firma que aparece en los documentos no corresponde a la mía, yo tengo la misma firma desde que adquirí mi credencial de elector, nunca la he cambiado y hay manera de demostrarlo”.

Ahora la SEDENA amaga con despojar de su departamento al individuo que tiene unos días para demostrar que nunca fue miembro de las Fuerzas Armadas, con lo que podría quedar al descubierto una red de defraudadores que operan dentro de las inmediaciones militares.