(+VIDEO) Sin clima en la UMF 52 del IMSS Naranjito; derechohabientes exponen la queja

**El problema lleva más de un año sin resolverse por falta de presupuesto.

DANNA PALMEROS-CI
Cosoleacaque, Ver. En plena ola de calor que azota al sur de Veracruz, los consultorios de la Unidad Médica Familiar (UMF) número 52, ubicada en la colonia El Naranjito, operan sin aire acondicionado desde hace más de 18 meses. La situación ha provocado malestar tanto entre los trabajadores como entre los derechohabientes, quienes denuncian condiciones insalubres y trato indigno en plena atención médica.

La falla en el sistema de climatización afecta a cinco consultorios durante los turnos matutino y vespertino, de acuerdo con fuentes internas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). En total, 24 trabajadores laboran diariamente bajo temperaturas extremas, mientras atienden a un promedio de 220 pacientes cada jornada.

Aunque el problema ha sido reportado en múltiples ocasiones a la dirección administrativa de la institución, no se ha ofrecido una solución concreta. Documentos internos y oficios enviados por personal de la unidad dan cuenta de las múltiples gestiones hechas, sin que hasta ahora haya respuesta efectiva.

La representación local del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS) ha reconocido el problema, pero también se ha limitado a informar que no hay recursos asignados para reparaciones o sustituciones del sistema de aire acondicionado.

La falta de condiciones adecuadas ha obligado a pacientes y trabajadores a buscar maneras rudimentarias de mitigar el calor. En imágenes y testimonios recabados por este medio, se observa a usuarios abanicándose con toallas, carpetas e incluso cartones mientras esperan ser atendidos. “Es como estar en un horno”, señaló una derechohabiente de la tercera edad que acudió a su consulta habitual.

Este escenario ha reavivado el debate sobre la falta de inversión en infraestructura médica y la desatención a unidades familiares del IMSS en regiones de alta vulnerabilidad climática. Mientras tanto, la UMF 52 continúa operando en condiciones que contradicen los principios básicos de salud y bienestar para los que fue diseñada.